El Unicaja firmó un estreno impecable en la Eurocup al ganar de forma clara en la pista del Buducnost por (62-86). Fue un encuentro muy fácil para el conjunto que dirige Joan Plaza, que al descanso ya ganaba por un contundente 34-55. Con esta ventaja la segunda parte casi fue un añadido en la que la victoria nunca peligro. Joan Plaza aprovechó para ir acoplando más a su plantilla y dio muchos minutos a N'Diaye y Fogg. El máximo anotador del partido fue Jamar Smith, con 19 puntos y un perfecto 3/3 en triples. Tras este encuentro, el próximo partido del Unicaja será el domingo en la pista del Iberostar Tenerife, líder de la Liga Endesa (13.30 horas)

El encuentro comenzó con muchas imprecisiones por parte de los dos equipos y con Fogg sin acertar a tomar el control del juego malagueño. Por suerte, Jamar Smith veía el aro como una piscina, así que el daño fue menos. Pese a que los locales se situaron 10-9, la entrada de Lafayette y el gran acierto desde la línea de tres por parte del Unicaja provocó que el partido se rompiese a las primeras de cambio. Todo era muy fácil. Musli campaba a sus anchas por la zona, pues su defensor no recibía ayuda alguna, y ahí el jugador del Unicaja se imponía con su calidad. A pesar de que el Buducnost estaba pendiente de frenar a los tiradores malagueños, no lo consiguió. Especialmente acertado estuvo Dani Díez y entre él y Musli firmaron un parcial de 9-22 que casi sonó a sentencia al final del primer cuarto (19-31).

El partido estaba roto y el segundo acto comenzó con un intercambio de triples con Waczynski soltando la mano y cogiendo confianza cara al futuro. El polaco firmó diez puntos casi seguidos y el Unicaja alcanzó los 20 de ventaja con cuatro minutos por delante hasta el descanso (27-47). Con el encuentro encarrilado tras unos buenos minutos de Lafayette, Plaza devolvió a Fogg y ya sólo quedaba comprobar si el Unicaja sería capaz de superar los 53 puntos en la primera parte, su récord histórico. No lo hizo, pero el 34-55 al descanso dejó el partido resuelto.

Era imposible que el conjunto montenegrino remontase, en parte porque su juego no se lo permitía. Por si quedaba alguna duda, los árbitros se encargaron de eliminarla. Dos antideportivas seguidas contra el equipo local permitieron al Unicaja ampliar su renta. Tampoco le hizo falta el favor arbitral, porque Smith seguía letal desde la línea de tres, y a los 25 minutos la ventaja cajista era ya de 25 puntos (41-66). Plaza aprovechó para rotar a sus jugadores, dio minutos a N'Diaye, también a Fogg, y entre ambos se encargaron de castigar el aro local con buenas combinaciones (48-74, min. 30).

El partido se afeó en el último cuarto, con el Unicaja notablemente relajado y su rival casi entregado. El ritmo anotador decreció mucho, pero la renta cajista no decreció. Plaza tuvo claro que era el momento para ir sumando jugadores a la causa, de ahí que mantuviese a N'Diaye y Fogg en la pista con vistas al futuro.

El mejor: Jamar Smith asume el papel de anotador en Montenegro

Plácido debut del Unicaja en la Eurocup, en la pista de un Buducnost que no ofreció mucha resistencia (62-86). Varios jugadores del cuadro malagueño hicieron buenos números, con cinco de ellos con más de diez puntos anotados. Quizás el más destacado fue Jamar Smith que, ante la baja de Nedovic, asumió sin problemas el rol de anotador y guió a su equipo en la primera mitad.

Smith jugó solo 18 minutos, pero fueron suficientes para exhibir su puntería e ir minando poco a poco la defensa local, que tampoco era muy activa. El norteamericano terminó con 19 puntos y 21 de valoración, con grandes porcentajes (4 de 6 en tiros de dos, 3 de 3 en triples y 2 de 2 en tiros libres).

Junto a Smith, que parece que va a más en este inicio de temporada, destacaron Musli (16 puntos y 20 de valoración) y Dani Díez, que hizo una excelente primera mitad y terminó con 12 puntos y 4 rebotes.